El “Satélite de la esperanza” está en órbita!!!


La Santa sede puso en órbita el «satélite de esperanza» que llevará el discurso que el papa Francisco pronunció en 2020 en el que planteó que «nadie se salva solo», en lo que pretende ser un «mensaje para la humanidad» que transmitirá las palabras del pontífice desde el espacio.


«Con un cohete que partió desde una base de Vandenberg, California, pondremos en órbita un satélite que llevará el libro del rezo del 27 de marzo de 2020 en formato nanobook», dijo el viceministro de comunicación vaticano, Monseñor Lucio Ruiz, al dar a conocer el evento con el que busca «prolongar el abrazo que el Papa le dio ese día a la humanidad».

El discurso del Statio Orbis de marzo de 2020 fue recogido en un libro titulado «¿Por qué tienen miedo? ¿No tienen fe todavía?» editado por el Vaticano y que el pontífice regala a personalidades y jefes de Estado que lo visitan.

«El proyecto se llama Spei Satelles, satélite de la esperanza, que lleva el mensaje del Papa a la humanidad y la convoca a reunirse», precisó Monseñor Ruiz.

En lo que se describe como un «trabajo único de colaboración» entre la exploración espacial y la Iglesia Católica, el Vaticano puso en órbita el recordado discurso del pontífice para renovar su importancia como «un mensaje de esperanza para la humanidad», a través de una iniciativa conjunta de la Agencia Espacial Italiana, del Consejo Nacional de Investigación y del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede, se informó este lunes en conferencia de prensa.

Andrea Notargiacomo, del Instituto Italiano para la Investigación, planteó el «compromiso» de la institución para «la realización de un microchip de silicio de forma de ultraminiatura en la que está toda la publicación dedicada al 27 de marzo de 2020».


«Pudimos reproducir en tamaño microscópico las 150 páginas del libro, que ocupaban unos nueve metros cuadrados de papel y ahora son unos pocos milímetros», agregó Notargiacomo.

«Esperamos que el satélite pueda permanecer por mucho tiempo en el espacio a dar una voz de esperanza», agregó luego el investigador.