Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús

 


Se celebra el viernes posterior al segundo domingo de Pentecostés.

El Santo Padre nos dice que el Sagrado Corazón de Jesús invita a aprender “del Señor que se ha hecho alimento, para que cada uno pueda estar todavía más disponible para con los otros, sirviendo a todos los necesitados, especialmente a las familias más pobres”.



La devoción al Corazón de Jesús ha existido desde los inicios de la Iglesia, desde que se meditaba en el costado y el corazón abierto del Señor.

Cuenta la historia que el 16 de junio de 1675, el Hijo de Dios se le apareció a Santa Margarita María de Alacoque y le mostro su Corazón rodeado de llamas de amor, coronado de espinas, con una herida abierta de la cual brotaba sangre y, del interior del mismo salía una cruz.

Santa Margarita escuchó a Nuestro Señor decir: «He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres, y en cambio, de la mayor parte de los hombres no recibe nada más que ingratitud, irreverencia y desprecio, en este sacramento de amor».

Con estas palabras Nuestro Señor mismo nos dice en qué consiste la devoción a su Sagrado Corazón.

La devoción en sí está dirigida a la persona de Nuestro Señor Jesucristo y a su amor no correspondido, representado por su Corazón.

Dos son los actos esenciales de esta devoción: amor y reparación. Amor por lo mucho que Él nos ama. Reparación y desagravio, por las muchas injurias que recibe sobre todo en la Sagrada Eucaristía.