Un cristiano debe tener palabra, ser firme en su hablar. . .


Un cristiano debe tener palabra, ser firme en su hablar. . . 

La Biblia dice: «Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación» Santiago 5: 12. . . 

Los juramentos reflejan una manera vacilante de proceder y actuar, como si se dudara de lo que se afirma; y están basados en cosas que no podemos garantizar; Jesús dijo: “Pero yo os digo” No juréis en ninguna manera; ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por Jerusalén, porque es la ciudad del gran Rey. Ni por tu cabeza jurarás, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. Pero sea vuestro hablar: Sí, sí; no, no; porque lo que es más de esto, de mal procede» Mateo 5: 34- 37. . . 

El hecho de jurar no va a hacer que un embustero no jure en vano, se trata de una regla hueca; la garantía que ofrece el cristiano es su conducta.