La importancia de los movimientos

Muchos hermanos preguntan... Por qué existen tantos movimientos laicos y apostólicos en nuestra iglesia. Les tengo la respuesta.

Sabemos que unos se sienten más cómodos perteneciendo a grupos con los cuales se identifican, existimos muchos que buscamos congregarnos en grupos en los cuales podamos servir a nuestra iglesia.

Movimientos eclesial es un término contemporáneo aplicado a grupos y asociaciones eclesiales de fieles cristianos,​ conforman comunidades dentro de la Iglesia católica que tienen una determinada forma de llevar a cabo o vivir la fe católica.​ En ocasiones están dedicadas a la evangelización y actividad misionera. También son conocidos como movimientos laicos, para diferenciarlos de movimientos de religiosos o de vida monástica. Tras el Concilio Vaticano Segundo se incrementó la aparición de muchos de estos movimientos.

Los miembros de un movimiento eclesial laico viven su vocación bautismal a ser discípulos del Señor por medio de un lente espiritual llamado «carisma», y tienen diferentes prácticas de vida y modos de oración apropiados a cada Movimiento y Comunidad. Por ejemplo, un miembro de la Renovación Carismática puede pertenecer a un grupo de oración que hace el don del Espíritu Santo inmediatamente evidente, o bien puede pertenecer a un equipo de oración que intercede poderosamente por las necesidades de los demás. Un miembro del Regnum Christi puede ser la madre de una familia numerosa que también evangeliza enseñando a los grupos de preparación para el bautismo en su parroquia. Los miembros del Movimiento Neo-Catecumenal emprenden un largo proceso de conversión personal para alcanzar las gracias que nos pertenecen a través del bautismo, a los católicos inactivos y a los aún no bautizados.

Beneficios
1.     Permiten congregar a las personas en espacios más acorde a lo que necesitan, buscan o desean.
2.     Abren más espacios para el servicio en la iglesia.
3.     Permite segmentar grupos para formación.
4.     Abre más espacios de servicio.
5.     Se dirigen a grupos más enfocados a trabajar en la fe
6.     Nos mantienen unidos en una misma fe ya que todos somos católicos no cetarios.
7.     Aumenta el sentido de pertenencia de sus miembros.
8.     Permite trabajar diversos temas: grupos para familias, jóvenes, adolescentes, solteros, etc.
9.     Permite llegar a nuevas personas que buscan espacios más allá de la misa dominical.
10. Nos permite conocer a Dios de una forma distinta.
11. Nos saca de la rutina
12. Permite desarrollar lideres
13. Ayudan a trabajar temas sociales y comunitarios