Ecumenismo


A raíz de la presentación del pastor y cantante Jesús Adrian Romero y la invitación de un cantante católico para que lo acompañe en este concierto en Rep. Dom. han surgido muchos comentarios a favor o en contra y resalta el termino ECUMENISMO, que muy pocos conocen. Te compartimos en este post un poco de información sobre este término.

Aquí no vamos a discutir o defender si es buena o no esta tendencia, lo que si es importante es que conozcamos los términos, conceptos, historia y demás rasgos que se relacionan a nuestra fe.

Por Ecumenismo se entiende el movimiento surgido, por la gracia del Espíritu Santo, para restablecer la unidad de todos los cristianos. Participan en él los que invocan al Dios Uno y Trino y confiesan que Jesús es el Señor y Salvador. Casi todos, aunque de distinta manera, aspiran a una Iglesia de Dios única y visible. 

El Movimiento Ecuménico comenzó oficialmente con el Congreso Misionero de Edimburgo (Escocia) en 1910. Surgió en un ambiente protestante y en un contexto misionero, por la necesidad de presentar un frente unido en los países paganos.

La Iglesia Católica considera la separación de los ortodoxos y los protestantes como una herida profunda infligida a la Iglesia de Cristo. Por lo que al mismo tiempo que las iglesias protestantes, inicia un movimiento a favor de la unidad de los cristianos.

Ecumenismo protestante
Las tres grandes figuras que pusieron las bases del ecumenismo protestante fueron:

Carlos Brent. Episcopaliano canadiense. En 1927 reunió en Lausana, Suiza, una conferencia que dio origen al movimiento Fe y Constitución. Su objetivo era unificar la doctrina.

Natan Sôderblom. Obispo luterano de Upsala, Suecia. Trató de enfocar la unidad de los cristianos bajo el aspecto práctico y no doctrinal. Buscaba la colaboración de las actividades prácticas como camino para llegar a la unidad. En el Congreso de Estocolmo de 1925 fundó el Movimiento Vida y Acción.

Juan Mott. Metodista, enamorado del ecumenismo. Su lema fue: "Mediante la acción unida de todos, demos muestra de que el ecumenismo es una realidad, dejando a la Providencia manifestarnos el camino a seguir". En 1946 recibió el Premio Nobel de la Paz y fue presidente vitalicio del Consejo Ecuménico.

Ecumenismo católico
Preocupada por la división de los cristianos, la Iglesia Católica continúa el movimiento ecuménico, a través de distintas acciones:

En 1925 se organizaron encuentros llamados "Diálogos de Malinas", entre el cardenal Mercier, arzobispo de Malinas y primado de Bélgica, y los anglicanos.

En 1930, el padre José Metzger fundó la asociación "Una Sancta", con el objetivo de fomentar el ecumenismo.

El Padre Watson, un protestante convertido al catolicismo, fundó el "Octavario por la Unión de los Cristianos". Consiste en dedicar cada año ocho días de oraciones y estudio a favor de la unión de los cristianos, del 18 al 25 de enero. Este octavario actualmente ha adquirido dimensiones mundiales.

En 1960, el Papa Juan XXIII, funda el "Secretariado para la Unión de los Cristianos". Fue puesto bajo la presidencia del Cardenal Agustín Bea, es el organismo católico por excelencia para promover la unión de los cristianos.

El "Decreto Conciliar sobre el Ecumenismo" (Unitatis Redintegratio), presenta las bases doctrinales y las líneas de acción práctica del ecumenismo católico. Fue promulgado por el papa Paulo VI el 21 de noviembre de 1964, durante la celebración del Concilio Ecuménico Vaticano II.

La Asociación "Ut Unum Sint", palabras tomadas de Jn 17, 21, que significan "Que sean una sola cosa", fue fundada por la Congregación del Concilio y tiene como finalidad promover la unidad de todos los cristianos en la única Iglesia de Cristo.


Encuentros ecuménicos de los jerarcas de distintas confesiones

La asistencia de observadores de las Iglesias anglicana, luterana, reformada, metodista, cuáquera y otras, al Concilio Vaticano II.
En 1960, la visita del doctor Fisher, arzobispo anglicano de Canterbury.
En 1962, en encuentro del papa Paulo VI con el patriarca ortodoxo Atenágoras. 
En 1965 Roma y Constantinopla levantaron mutuamente las excomuniones lanzadas en 1054. 
En 1966 Paulo VI dialogó con el doctor Ramsey, sucesor de Fisher. 
La costumbre de Juan Pablo II de orar en común, en todos sus viajes, con los representantes de los hermanos separados. 
El encuentro en Ghana, de Juan Pablo II con el arzobispo anglicano de Canterbury, doctor Robert Runcie. 
La visita de Elías II, patriarca ortodoxo de Georgia, al Vaticano. 
La reunión en Patmos, Grecia, en1980, de representantes católicos y ortodoxos.

Encuentros ecuménicos de oración
En Taizé, Francia, el hermano protestante Rogier Schutz dirige una comunidad de oración interdenominacional, que organiza encuentros internacionales de reflexión y oración, con la participación de protestantes, ortodoxos y católicos. Su luz está inundando la cristiandad entera y representa un buen auspicio para la unidad de los cristianos.

Porque la unidad de los cristianos es el gran sueño de Cristo, el deseo de esa unión debe penetrar la fe de la Iglesia; debe reflejarse en la actitud concreta de fe de todo cristiano-católico e influir en su actuar. A pesar de todo, es más lo que nos une que lo que nos divide.



FUENTE: CATHOLIC:NET