Escrito por el Padre HENRY VARGAS HOLGUÍN 3 FEBRERO,
2016
Una madre, al querer alimentar a sus hijos, no les
pone en un día sobre la mesa todos los alimentos de la semana o del mes o del
año entero, sino que cada día les da una pequeña ración.
De la misma manera la Iglesia, que desea que los
fieles escuchen todo el contenido de la Sagrada Biblia, reparte a su tiempo e
inteligentemente cada día las porciones necesarias de este alimento espiritual;
y dar todo el alimento requiere su tiempo.
Por eso la Iglesia ha dividido las lecturas
bíblicas en tres ciclos: A, B, y C. Es decir si una persona participa
atentamente en la misa dominical durante tres años habrá escuchado
prácticamente toda la Sagrada Escritura.
También escuchará un poco más completamente toda la
Biblia en un espacio de dos años si participa en la misa diaria todos los días
laborables.
Durante estos días feriales, las lecturas se
dividen en dos grupos que se van alternando según sea el año: Año par o año
impar. ¿Cuándo es un año par o impar?
Todo dependerá del año civil en que transcurra la
mayor parte del año litúrgico; por ejemplo, este año litúrgico, que empezó el
primer domingo de Adviento del año 2015 es, sin embargo, litúrgicamente hablando
un año par, porque la mayor parte del año transcurre en este 2016, que es un
año par.
En cuanto al evangelio dominical el orden de los
ciclos A, B, C, coincide con los tres primeros evangelios del Nuevo Testamento,
los evangelios sinópticos; es decir durante el ciclo A se leerá cada domingo el
evangelio según san Mateo, durante el ciclo B se leerá cada domingo el
evangelio según san Marcos y durante el ciclo C se leerá cada domingo el
evangelio según san Lucas.
Y cuando acaba el ciclo C, en el que estamos
durante este año civil 2016, automáticamente se regresa al ciclo A.
Recordemos que cada ciclo empieza con el inicio de
cada año litúrgico, es decir con el primer domingo de Adviento.
Y como los evangelios son cuatro, notarán que no
hemos mencionado el evangelio de San Juan. ¿Cuándo se lee el Evangelio de San
Juan? El Evangelio de San Juan se lee durante el tiempo de Pascua especialmente
y esto durante los tres ciclos.
Ahora bien, aunque a una persona no les sea posible
participar en la misa entre semana puede, por lo menos, leer las lecturas
bíblicas de las celebraciones eucarísticas diarias de los tiempos fuertes:
Adviento, Navidad, Cuaresma, Pascua; y las lecturas bíblicas de las
celebraciones eucarísticas entre semana del tiempo ordinario.
¿Por qué a éste tiempo del año litúrgico se le dice
ordinario? Porque “ordinario” hace referencia lo que ordinariamente solía hacer
o enseñar Jesucristo.
No sobra añadir que esta distribución litúrgica de
la palabra de Dios tanto para los días domingos como para los días feriales es
igual para toda la Iglesia en cualquier rincón del mundo.
Fuente: http://es.aleteia.org/2016/02/03/que-son-los-ciclos-liturgicos/?utm_campaign=NL_es&utm_source=daily_newsletter&utm_medium=mail&utm_content=NL_es-Feb%2003,%202016%2004:52%20pm