1. La liturgia de los cantos en la misa.



Uno de los dolores de cabeza que tengo más grande es al ver coros, ministerios, solistas y cantantes animando una misa como si fuera un concierto, ocupándose de los asuntos de entonación, ritmo, sonido, tono y demás pero no de la liturgia. 

Como se llama el ministerio de canto al que pertenezco CO2, debemos recordar que cantar es orar dos veces, los cantos en las eucaristías no son canciones sino cantos o canticos que corresponden a la actividad más importante de nuestra iglesia, ya que no existe evento que sobre pase la importancia de la misa.

No hay que ser un teólogo para tener los conocimientos básicos de la liturgia de los cantos en la eucaristía y es muy deprimente ver los errores que cometemos por falta del interés de conocer nuestra fe. 

No todos los cantos se hacen. Cada tiempo litúrgico trae consigo, además de los cambios de colores y de rituales, cantos especiales que corresponden a cada tiempo y momento de la misa, únicos para esos momentos. Más especialmente, hay momentos en la misa que se hacen oraciones cantadas y dichos cantos jamás deben salirse de esas oraciones y su fin. Es por esto, que estaremos publicando una serie de artículos en las que examinaremos paso a paso cada canto de la misa. No somos expertos ni mucho menos, pero esperamos poder contribuir a la formación de muchos de nuestros coros que por desconocimiento cometen el error de faltar a la liturgia. 

Los errores más graves y comunes son el gloria, el santo y el cordero, se nos olvida que son oraciones, y que están textualmente escritas en el misal, pero son los cantos en los cuales los coros persisten en errar. 

Si algo aprendí de mi anterior párrafo es de que a Dios se le da lo mejor, por tanto les invito a que nos ocupemos en aprender sobre la fe que profesamos. 

Iremos paso a paso, espera nuestro próximo artículo, espéralo.