Reflexión sobre la vida en pareja!

Si la familia fundamentara sus cimientos en Dios, la violencia intrafamiliar fuera inexistente. Donde existe Dios existe el amor, el respeto mutuo, la fidelidad y la comprensión. Hoy la República Dominicana celebra el día de la lucha contra la violencia hacia la mujer. 


Cuántas mujeres pierden la vida a mano justamente de las parejas que ellas llegaron a amar. El núcleo familiar debe estar cimentado en Cristo y el amor verdadero. Muchos son los que inician matrimonios, noviazgos y relaciones informales sin sentir un verdadero amor hacia la otra persona y sin tener a Dios en sus corazones como centro de la misma.


La juventud en especial, tiende a confundir lo que es estar enamorados con la atracción física, muchos otros mantienen relaciones sólo por el acto sexual sin tener realmente sentimientos fuera de la atracción física. De ahí vienen las desconfianzas, infidelidades, discusiones y todo lo demás que se da entre las parejas. Es por esto que al iniciar una relación, lo primero debe ser Cristo!

El matrimonio no son dos, sino un mismo cuerpo y alma que deben unirse a Cristo, así que ya no somos dos sino uno en Cristo. La cabeza del hogar es el Señor, seguido del esposo y la mujer hasta llegar a los hijos. Jamás sin Dios. 


Ayer celebraban algunos países el día de acción de gracias, pero cada día es una nueva oportunidad para dar gracias a Dios. En especial los hogares y las familias, que sean estas testimonios de Cristo a través de su relación de pareja.


En Cristo Jesús aprendí que la boda es un día, el matrimonio es para toda la vida! La fe, el respeto y amor mutuo es el éxito de la vida en pareja.